Es una cala “perdida” y poco conocida del norte de Menorca. Con una playa de unos 50 mt. y de difícil acceso caminando la convierten en un lugar poco transitado, un verdadero paraíso…! Todos sus alrededores son totalmente vírgenes, les recomendamos su visita por su entorno idílico y tranquilo. Suele estar frecuentada los meses de verano de embarcaciones de los puertos colindantes, porque la isla de tosqueta, a escasos 40 mt. Le aportan resguardo y protección de los vientos. Sus grandes praderas de posidonia y zonas rocosas, al igual que el resto de calas que ofrecemos, están llenas de vida marina, un verdadero paraíso para hacer snorkel.